
Foto: El secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio (izq.), le susurra al oído al presidente, Donald Trump, durante una rueda de prensa en la Casa Blanca, en Washington, el 8 de octubre de 2025 © Jim Watson / AFP
Una escena inusual en la Casa Blanca marcó el momento en que Donald Trump se enteró del acuerdo entre Israel y Hamas para un alto el fuego en Gaza. Según fuentes diplomáticas, todo comenzó con una nota rápida escrita a mano que llegó al presidente durante un evento oficial, seguida por un susurro al oído que cambió el curso de aquella jornada.
Mientras Trump participaba en una mesa redonda pública —sin pistas de que algo inminente estaba por suceder—, el secretario de Estado, Marco Rubio, se acercó discretamente con un mensaje manuscrito. La nota instruía al presidente para que autorizara la publicación en su red social, de modo que él fuera el primero en anunciar el pacto. Rubio susurró entonces: las negociaciones habían alcanzado un punto decisivo.
El gesto fue captado por cámaras presentes. Trump, visiblemente sorprendido y satisfecho, reaccionó con una leve sonrisa y dijo en tono inmediato: “Estamos muy cerca de concretar un acuerdo en Oriente Próximo”. Inmediatamente tras esos momentos, comenzó a circular el anuncio formal del pacto con Israel y Hamas, al que más tarde se le daría luz verde en el gabinete israelí.
El trasfondo político es tan dramático como simbólico: el acuerdo contempla un alto el fuego con etapas de retiro de tropas israelíes, la liberación de rehenes por prisioneros, y la apertura de corredores humanitarios hacia Gaza. Estados Unidos, junto con países como Egipto, Catar y Turquía, desempeñan un rol central en la mediación del proceso, supervisando los detalles de implementación.
Ese instante donde una nota cambió el curso del anuncio no solo revela la agilidad con que se manejan las decisiones en niveles diplomáticos, sino también el peso simbólico que Trump buscó tener en la escena: aparecer como actor clave y promotor del acuerdo justo al momento de su revelación.
En los próximos días habrá que ver si la estrategia vale tanto política como diplomáticamente. Pero ese instante —una nota, un susurro, una reacción inmediata— quedará como anécdota simbólica del modo en que entró en escena una de las noticias más esperadas en medio de este conflicto.